Una lechuga sin pechuga
le decía a la escarola
¿Adonde voy yo tan sola?
¿Quien me querrá con tan poca
sustancia?
A lo que contestó la espinaca
con jactancia, pues yo con
garbanzos sépo a gloria !Ah!
dijo la zanahoria que era
muy lista, a mi me quieren solo por
la vista, intervino el nabo, pues
yo tan soso, soy al cabo
el más hermoso.
El tomate que por allí pasaba,
dijo sin empacho !Soy el amo del gazpacho!
tengo al color de la sangre proletaria, pero
no por ser pobre, soy una ordinaria.