Yo soy un hombre felíz, que ama la vida, y piensa la huida.
El que tranquilo vio la nube gris.
Aquel que habla a la luna, que no se preocupa del ayer, que fábrica sus sueños en su taller, y que en las noches solo penso a una.
Feliz de amor poder haber conocido, que jugo con las estrellas, que contemplo las noches mas bellas, tan dichoso de su amor haber ofrecido.
¿Qué aveces hubo tristeza?, y que importa, si con su amor me regocije y que vale si con su piel me cobije; fui aquel que amo todo trabajo y odio pereza.
Yo y solo, yo, estoy sadisfecho, el que sólo vive, el que sólo sueña.
Tan felíz de no tener cadenas ni dueña, el mismo que agradece el sabroso elecho.
¿Aquellas guerras que Pelé, y no gané? No todo se logra, no todo, pero perdiendo se gana de cualquier modo, y si...no todo salio, como yo plane.
Contento de haber viajado en este mar tan ancho, también feliz de haber tanto amado, y que mas da si ya no esta a mí lado, tambien yo sin más avisarlo me marcho.
Feliz de haber conversado con rocas y plantas, de haber visto mil amores, de haber escuchado todo y oler mil olores y aventurarme en las colinas mas altas.
Felíz, felíz con la vida y la muerte, escuchen todos, me voy con mi líra, me voy cantando.
Hechado a mi hombro, me llevo a la que estuve amando, con carcajadas me despido que mas da si quedo inerte.
Yo no engañe a la amante, soy lo que aparento; ella no me regalo ni un besó, pero si una mirada.
Con ella se queda mi yo, y me llevo a ella, muy clavada; ya me voy, lejos y no lo se pero me voy, contento.