Federico Mendo Sánchez

AYER

Ayer fuiste el amor que yo adoraba

eras mi encanto, mi Dios, mi paraíso,

hoy eres el recuerdo del corazón que te amaba

y llegó el final porque Dios lo quiso


Como añoro las tarde de aquel verano

cuando cogidos de la mano paseamos

hoy esa arena cálida sufre como humano

porque tú y yo no le visitamos

 

Como estará de triste el parque aquel,

que de noche nuestros cuerpos abrigaba,

hoy alguien te dirá ¿ qué es de él?

más tu sin querer le dirás – ya no me ama-

 

La avenida de tu casa, la ventana de la espera

como añoran las tardes plomizas de invierno,

y el juguetear de tus manos o el chillido de una sirena

harás que vuelvas a sentir mi amor eterno.

 

Pero que desolado fin, que efímero fue tu amor,

me diste un beso, un abrazo y una despedida,

tus ojos lloraron,  los  míos,  miraron el dolor

de una mujer que fue muy querida.