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Con la tersura de sus labios besándome
se me acerca al oído para nombrar frases de ansiedad
invitándome a la locura de besarle en la distancia
tocando cada parte mía con sus labios de miel.
Atándome al eslabón de su mirada que ansío
dejándome en el silencio unas palabras de auxilio
y grito con todas mis fuerzas esperando que me escuche
cada latido suyo rogado por mi corazón.
Viene a mí con su nombre al que amo
a convencerme de amarla aunque ya le extraño
en esta distancia atroz que encadena los brazos
y deja el elixir imaginado entre tristeza y pasión.
Ella tan diáfana como una imagen inmaculada
lee mis escritos y me comenta en el alma
cada palabra suya es un motivo en mi causa
cada destello de su ser deja un vacío en mi cama.
Cuanto quisiera besarla entre vino e incienso
ella que se desnuda y me anda con sus manos ansiadas
en la reticencia de un amor hecho por la distancia
encontrados por un azar que juega con nuestras almas.