Soneto a los amantes de Teruel
Falta de dinero quita el honor
de a su dulce Isabel poder amar.
Por la reconquista irá a pelear
y al padre de ella ganarle el valor.
Feroz acomete al moro invasor
piensa en los sueldos que habrá de llevar
y así a Isabel podrá desposar,
la noble doncella objeto de amor.
El tiempo que vuela y le hace jugada
Juan a la cita llegó demorado,
ya el padre ha dicho que sea casada.
Un beso pide y el beso no es dado
y al recibirlo con vida escapada
va al mas allá por ella acompañado.
La historia se ha llorado
por aquellos que su amor no florece
porque de nombre y oro se carece.