Raúl Navarro

Ceniza

Sólo ceniza queda
de nuestro amor,
y se anuncia con un trueno orgullosa
la tormenta,
pronto no habrá por qué llorar,
porque morirá el recuerdo
de besos locos y caricias tiernas;
Solo ceniza queda
de nuestro amor,
y se escucha el estruendo de la lluvia
que se acerca,
ya no habrá chispa que avive
nuestra hoguera de amor,
ni una mirada fija
que nos encienda,
ni un roce leve
que desate la pasión
porque fuimos egoístas por naturaleza,
tú exprimiendo el jugo de mi corazón
y yo mordiendo el fruto
de tu inocencia.