MALDITA NOCHE En mi alcoba entrasteis, sin pedir permiso, de mi abusasteis, sin contemplación, dejasteis mi cuerpo muy lleno de heridas, gozasteis conmigo, por satisfacción. Malditos intrusos, yo hoy os maldigo, mis partes más íntimas, sufrieron la agresión, por ello hoy serena y calmada yo os digo, que sois animales sin ningún corazón. Me encontraba sola, débil e indefensa, tendida en mi lecho, llena de sudor, mi desnudo cuerpo, fue la fácil presa, y me torturasteis, causando dolor. Me dormí dolida, cansada y vencida, cuando desperté yo ya estaba sola, sábanas con sangre y llena de heridas, un dulce silencio reinaba en mi alcoba. Esta noche les esperaré en mis habitaciones, mi venganza será hasta los infinitos, pues les odio malditos abusones, estos bichos raros llamados mosquitos.