Melany Devia

A él

Puedo decirte aún
en el alba de mi vida,
que inolvidables son tus memorias,
aunque la triste despedida,
nos forzara a ser historia.

Entre clandestinos encuentros,
y de secretos, un intento,
fuimos forjando silenciosos, nuestra vida.
que se dio por mal servida.

Errores… más errores hubieron,
y fue el silencio, nuestra condena,
y sin notarlo, nacieron
los preludios de ésta pena.

Pero qué cobarde sería
si dijera: ‘me arrepiento’
de aquellos bonitos tiempos,
cuando lo eras todo en mis dias.