Jose Luis Posa Lozano

LA LLUVIA DE TUS BESOS

Tus lágrimas abren surcos en mi rostro,
coladas ardientes que me horadan el alma,
fauces que se clavan en mi cuello,
zarpas feroces que me despedazan.

Tu sufrimiento es el silicio que se clava
en mi pecho, en mi vientre y en mi espalda,
el látigo que lacera mi memoria,
la sal que me salpica la mirada.

Tu silencio es el aire del desierto
que me deja abrasada la garganta
que convierte en vinagre mi saliva
que me cubre de arena la esperanza.

Sólo espero tu risa redentora,
tu mirada de niña enamorada,
la caricia inocente de tus manos,
el beso de tu boca tan amada.

¡Que se aleje de mí la pesadilla
que se funda la escarcha de tus senos
que renazca el oasis de tu vientre
y me empape la lluvia de tus besos!