Mi día
Raudo se me ha ido el tiempo
hilvanando unos poemas.
En perseguir una nube
y en contemplar una flor
La noche me encontrará
elevando una oración
hablándole a una estrella
viendo marchita la flor.
Y dormita mi esperanza
aprisionada en mi lecho
en mi habitación vacía
visitada por el frío.
Y así terminará el día
y se me irá la ilusión.
viendo escaparse las horas
que llevan mi corazón.