Vamos caminemos en este atardecer
deja que la luz moribunda de la tarde llene tus ojos
respira este aire de mar, olvida el camino.
Ven, vamos dame tu mano
qué importa que nos miren, si prefieres seremos invisibles,
y al cruzar frente a todos contendremos la risa,
para que no los lastime nuestra felicidad.
Llega, te espero desde siempre
¡De antes!
De los tiempos gastados, polvorientos, vencidos,
de tus viejas cosechas; de lo que no he vivido.
No tengas miedo; vivo por ti y contigo
estoy hecha de ilusiones de confianza y amor
ven ya cae el sol
aquí salpicados de espuma quédate junto a mi
pon tu mano en el agua, ¿lo sientes?
Hierve; el mar es una enorme herida que desangra en rayos rojos, tibios.
Cierra los ojos, es un sueño alcanzable nuestra felicidad
¡Ya viene!
Escucha el galopar bajo las olas, de su hermoso caballo de coral.