Si, a veces, cuando me arropa la soledad, evoco tus recuerdos.
Y percibo el vació que quedo en mi alma, de lo que te entregue.
Fue mi vida, fueron sueños, el alma desnuda con mis anhelos.
Fue sufrir y comprender, que cuando tú me querías, yo te adoré.
Si… por ti llore con amarga y negra congoja,
De un mar de fuego tome el trago fatal de la derrota.
¿Como negar que te ame y que haces parte de mí historia?,
Si la última lagrima que por ti derrame, antes de caer al suelo ya estaba rota…
ISRAEL CARE.
(Derechos Reservados).