La eternidad del Sol
Buscando los rayos del sol,
abrí los ojos sin encontrar,
atisbo de calor que me cubriera con su manto,
entonces con las manos extendidas,
palpé el tibio viento de verano
Que susurró:
Yo permanezco.
Mis ojos ciegos,
ausencia de figuras.
Y en mis manos tu espíritu de vida.
Sol de girasol y de geranio.
Sol de esperanza y de alegria
Cálido rey,que eterno permaneces,
suave caricia que me abrazas y enterneces ,
con tus finos hilos de luz dorada y blanca,
me traes trocitos del cosmo milenario.
Sol de hoy, mañana .
Sol de siempre.
En invierno tus brazos amorosos ,
permiten a mis piernas cansadas,
continuar la batalla ,
de esta perpetua andanza.
¿Que amor más sincero que el tuyo grandísima deidad adorada por los hombres del pasado?
Que a la tierra regalas la existencia ,
y su continuidad gota por gota,
en cada palpitar incluso del más pequeño de los seres.
Humilde,
grandioso
Excelso en tu bondad de roca y fuego.