Por ahí hay una dama que me deja
cada tanto un mensaje zalamero,
que empieza sin pudor con un \"te quiero\".
Me molesta. Y de allí nace mi queja.
Como quien se descuelga por la reja
de mi patio o se cae del alero,
aparece, agua sobre un aguacero.
Tal como llegara es como se aleja.
Ocurre que me pide mi correo,
mi \"escayp\", mi celular o lo que fuera.
Y lo hace dulcemente, según veo.
Con respeto, señorita: es \"al ñudo\"
que me siga escribiendo a su manera,
no tendrá la respuesta que quisiera.
(No soy una lumbrera,
soy viejo, soñador, algo poeta,
pero no he de caer en esa treta)
Derechos reservados por Ruben Maldonado.
Aclaración. \"Al ñudo\": en vano, inútilmente (del glosario gauchesco argentino).