Julieta
por Luis Guillermo
¿En dónde estuvo ella,
tanto tiempo escondida?
En una palabra bella.
Es retrato de encanto.
Es retrato elegante.
Cabello cual diamante
siempre brillando tanto.
Al ver sus ojos me perdí.
Al respirar su esencia
simplemente enloquecí.
En fin, huyó mi conciencia.
Basta ya de alabanzas.
Aún persiste cordura.
Últimos versos torturan.
Las palabras quieren salir.
Maldigo a la censura
maldigo al torpe pudor.
Quiero tomar su cintura
y abrazarla con amor.
Las palabras necesitan,
necesitan osadía.
No llegan y no alcanzan
para cesar la poesía.
Su sonrisa me alegra.
Su figura me deleita.
Es cual flor de primavera
fina, frágil y preciosa.
Sosiego, al fin desperté.
mi desahogo concluyó.
Ojalá nunca olvide
el sueño que se agoto.