Yo te amo
aunque me sientas extraño,
aunque calle,
aunque respire y mire
diferente.
Te amaré por siempre,
hasta la muerte,
aunque te marches
y deje de verte.
Me mantendré leal a tus besos,
rezagado a tus abrazos,
te esperaré en la noche
y en el ocaso,
y si por si acaso
tu amor me mata como puñal
o como balazo;
herido y bien perdido
te confirmo que te amo
aunque me estés matando,
aunque me vuelva raro,
aunque en tus ojos vislumbre
un futuro asesinato.