El Hombre de la Rosa

¡¡¡ LA JUSTICIA QUE ESPERA UNA FAMILIA OBRERA !!!

 

¡¡¡ LA JUSTICIA QUE ESPERA UNA FAMILIA OBRERA !!!

 

*** Versos de la Rosa ***

 

Es el tiempo de reconducir el desvarío de esta vida

encauzandolo al sabor doméstico de tu apego filial,

nuestros vínculos encadenan su convivir al hombre

la vanguardia avanza por intereses del depredador,

este ciudadano es detritus que vaga entre sombras

sometiendo sin compasión al plebeyo que obedece,

sin el sentido de amparo al sustento de la hómbria

donde la protección de la familia prima sobre todo,

siendo un esclavo moderno atrapado por su existir

sin poderse liberarse de los martirios de la política.

 

Ese farrago de voluntad adormecida por la miseria

no sabe salvaguardar un despecho de desasosiego,

acicalan con lustrosos dorados un cachivache raro

para que tu ansia consumísta empeore más tu ser,

tienes instrumentos que laboran todo sin fatigarse

pero tienes que sufragarlos antes de lograr comer,

venden más pistolas para el que las adquiera mate

es más barata una bala que mí pensión del obrero,

aquel que os desahucia para conseguir la vivienda

 llenando la casa de deudas para desbordar tu vida.

 

No provocan sus terribles guerras que antes había

al señorío de ahora le basta con arruinar al pueblo,

obligándole a trabajar para solo comer el sobrante

triturando el antiguo orgullo que al hombre poseia,

la pensiones de padre y abuelo palian la amargura

con los hijos y los nietos mendigando el afán vital,

hasta que tu viejo marche al clarín de la eternidad

cuando mí legitimidad del bien descarte la maldad,

esperando que se abra esa puerta de su conciencia

al discernir el desenlace vital que traerá la justicia.

 

Mil palabras vivas son como mil flechas del viento

cuando solamente sirven para respirar leyéndolas,

empapadas del sentido cuando se juntan sin rubor

dejando la oración de la palabra plena de emoción,

chocando con alegre armonía que posee concordia

para vivir la fuerza que crea su condición humana,

cuando se maravillan por haber sabido entenderla

recreando la sabiduría con veneno de las palabras,

con pócima de aspíc que pone un rapsoda solitario

cuando empuja al viento todo el aliento de la boca.

 

Autor:

Críspulo Cortés Cortés

El Hombre de la Rosa

25 de marzo del 2017