MI VIDA
La vida tuve en mis manos
tratándola cual moneda
con juventud que miramos
y hasta aquella se aleja,
portando caudal de sangre
por las venas se renuevan
va traspasando caminos,
aquellos también son penas.
Con alegría del núbil
y sentir de primavera,
corres delante del mundo
y recorriendo veredas.
Experiencias recogidas
con ideas que son nuevas,
crees atar el universo…
y tan solo tú lo intentas.
Miras a tu alrededor,
y ves falsedad impuesta.
Vas creando los caminos
para una vida incierta.
Al fin sitúas tu cuerpo,
sobre el lecho que aciertas,
tu osamenta vas cubriendo
con una capa bien puesta,
y descubriendo jardines
y limoneros que acechan
los placeres olfativos
de albahacas y jazmines
y rosaledas alertas.
Por fin recorres arroyos
ves juncos en la ribera,
te recoges en la adelfa,
-aunque pique, te recreas-.
Levantas la vista al cielo,
y a pesar que no, Lo veas,
le das gracias a tu Dios
y para que el mundo crea,
tu postura has de dar
con una actitud sincera.
Actitud que en este mundo,
con intereses que imperan,
de mentiras encubiertas
para conseguir estatus,
aunque no los merezcan.
Abrirse con honradez
a las gentes sin problemas
en convivencias tenidas,
que eso merece la pena.
Hoy vibrare con el rayo
que regenera arboleda,
con la tormenta que cae,
para regar ya la siembra
con ese día nublado,
que en el corazón aprieta.
Quiero contemplar el mar,
y ver las olas que llegan,
mirar al niño asombrado
viendo libar una abeja.
¡Ay! mis noches y mis días,
disfrutar aún quisiera
con el aroma de Dama
que en la noche ella despierta.
Ya mi poesía valdrá
para validar sentencias
de usurpadores que abusan
de poder y prepotencia,
viva en libertad el pueblo
que sacrifica su hacienda
para decirle al ladrón,
que el pueblo también sentencian.
Aquella vida en mis manos
que controlé en conciencia
sin perjudicar a nadie
que era la regla propuesta,
y la mariposa libre
libe a la flor que es abierta.
©Reservados los derechos de autor
Roberto J. Martin
Málaga Marzo 2017