Hay una implosiva realidad de la conciencia que nos lanza con ese estar siendo la nada al vacío,
es ese algo que nos estalla y nos arroja alienados, con angustia al misterio...
Es este poder de estar y permanecer... en este permanente juego de letras de colores desde la niñez... esta búsqueda de encontrarse ante la necesidad imperiosa de ser mirada, de no ser olvidada, de ser abandonada y no ser amada.... esta locura en espiral mágica de solo ser el desatar de todos los miedos y los demonios... ese pasaje de ser en un instante dios y en otro solo satán....
Tantas imágenes se desprenden de mi ser... tantos seres ... tanta dolor y muerte... tanta guerra en cruz a puño cerrado en el centro de la mesa... y ese exquisito e inolvidable olor a pipa... a puros... a tabaco... ese rito mágico de girar al compás de la música celebrando la vida... ese juego de atar todos los nudos en nombre de la búsqueda de paz ... Y este ego que mata ... y saca la frescura y la brillantez de ser esa parte loca y libre... ese pido gancho... A andar descalza, desnuda! A amar y ser amor libre... de perderse siendo la versión más bella de Julieta, de ser la historia de los amantes...
Soy esa versión en la más absoluta libertad...habita en mi. Soy la muerte viva... soy la irreconciliable enemistad ... soy la pasión y el amor desenfrenado... lo prohibido... Soy el destierro... el sufrimiento y la agonía... Soy la muerte y la vida... apostando por toda la eternidad a la vida
Soy mujer y madre de nueve lunas en la pureza del corazón ... Soy Inés... Soy poema.... Soy la versión libre de la Víspera de Santa Inés... soy las cuarenta y dos estrofas de nueve versos de Jhon Keats ... soy hija del fruto prohibido de la raza aria y gitana... Soy eterna danza danzante gitana como mi madre Inés... Soy y mi nombre real es María Inés Castro Videla...
Soy leyenda...escrita en cartas de lengua inglesa... Soy la joven de trece años Inés de Roma que fue martirizada por no entregar su virginidad en la noche del 21 de enero... a la inocencia y al amor... Soy la simpleza... la negación caprichosa y rebelde de aprender la lengua inglesa y francesa obligatoria en la casa grande y en la escuela... de que hay un saber anterior más fuerte de saberse y de pertener que uno, es esa lucha, sin palabras anterior a la propia conciencia de lo que uno cree saber ser ... en esa lucha de clanes....
Soy verso y prosa... sonoras y plásticas muriendo y volviendo a nacer...
Soy el caos y el sentido ordenado...
Soy J’écrivais des silences, des nuits, je notais l’inexprimable. Je fixais des vertiges.\" de Arthur Rimband
Soy ese viejo cuento de hadas... maravillosos de tapas duras de marrón oscuro que se hacia bandoneón y uno giraba locamente en calesita ...
Soy esa, la que venía en barco dentro del baúl de pieles y las joyas de la abuela, de las fiestas y las excentricidades de europa y, la exquisita y rigurosa sobriedad en letra a pluma de mi abuelo en cada viaje, en cada despedida, en el miedo de la soledad y la locura de perderme y de perderlos... Soy el recuerdo vivo de lo oscuro y lo trascedental... Soy cada uno de esos seres que me habitan y despliegan mis alas ... Soy la liberación realizada en cada uno de mis hijos por amor en la más absoluta libertad... Soy la locura, lo erotico y el lamento... Soy la libertad obscena... Soy la que te dice que te falto coraje... Soy el arte que me lanza siempre des vistiéndome a la letra, a la palabra escrita y que me plasma danzando con los pinceles en el estallido de color ante el caos del lienzo en blanco... Soy todas esas ... y sigo siendo la rebelde niña de los ojos moros llorando océanos hasta secarse, solo por amor vestida de terciopelo con zapatos de charol de mirada desafiante y provocativa, sin conciencia soltando el lazo de seda de mi pelo en la oscuridad de la función del teatro colón ... sintiendo el corazón palpitando...la sangre en las venas... Soñando despierta... Danzando en las arenas del desierto junto a mi mami Inés mirando al cielo y solo inclinándonos ante Dios ...
Mané Castro Videla