Cuando caiga la noche y dulcemente duerma en tus brazos
estrecharé tus suspiros con el palpitar de mi corazón,
Fundiré tu frío exquisito con el aroma de mi piel
y la calidez de nuestro encuentro será perpetuo.
Tus ojos de magia brillaran como dos luceros del desierto
y me díran verdades ocultas en tu alma, verdades,
que solo sabe tu corazón...
El silencio será nuestro confidente y la tenue musíca
complicé, que amenice este instante de amor;
sobraran las palabras, faltara el aliento .
Será una noche sublime, volaré entre nubes de algodón,
acariciaré arcoíris de azúcar y cabalgaré en el más bello
y majestuoso unicornio color rosa...
Será nuestra noche, solos tu y yo.