Como se van en dos hojas las palabras del amor escrito, me fui...
me fui con todo el amor, me quedé con todo el sentir...
Pero sin ser hoja, ni letra, sin ser tinta... Siendo humana, siendo latidos y voz me fui.
En dos hojas las palabras del amor escrito llegan a su destino; a los ojos que las leen, a los labios que las pronuncian...
Y yo, sin ojos que me miren, ni labios que me besen, me fui.