La Aurora da un espectáculo en silencio
Se refutan los ruidos de la ciudad
Los pinos susurran
Se rozan entre ellos
Se acarician
Danzan entre el viento
Y aplauden mis oídos
Mis labios
Mis manos
Mi barba huele a pino fresco
El frío es sofocante
La bruma adormece mis manos
Pero soy un niño
Que da aguante, a los amores de esta madre