Eres regalo a mi poesia.
Eres,
Ardiente y fugaz
De noche,
Dulce dama de dia.
Llenas mi vida de alegria.
Siento,
Sin tu amor, yo moriria.
Me pregunto:
¿Se fijaria una rosa,
Linda y olorosa,
En un simple cardo sin gracia?
Mi respuesta es;
Siendo tu tan bella, y fina,
Te fijaste en mi persona,
Con cero de aristocracia.
Te amo bien y a la buena.
Eres tan fuerte y a la vez,
Tan tierna.
En nuestro lecho formamos,
Maravillosa mancuerna.
Si llegase a morir, primero que tu,
Cuando mi cuerpo,
Ya se encuentre tendido,
Imagina que estoy dormido.
Me abres el corazón,
Asi sabras, lo que te dije
En vida,
Nunca fue fingido.
Me remueves la flecha,
La cual clavó,
El traviezo
De Cupido.
Colocas tus pechos sobre mi cara,
Como un ultimo adios.
Yo, desde el mas alla
Los besare.
Primero uno, luego los dos.
No te importe
Lo que la gente
Murmure, o hable.
Solo cuenta,
En un sueño,
Yo te dije
De ti tener hambre.
Te amo hasta la muerte