HIMNO A MI EGO
He versado tu hálito de letras exquisitas
y en el rincón del alma gimotea una canción
el símbolo que imprime el corazón
es el ímpetu, el lazarillo que te guía por los senderos
de la humilde audacia.
Desequilibra las emociones y destroza la razón
para poder dar el gran salto y embarcarte
en un vuelo gigantesco
donde tú y solo tú
puedes manejar semejante locura
eres un aluvión de sensatez y desfachatez
te divierte jugar al artista
y trisca con las letras como un equilibrista
en un ámbito intenso, discurres los mejores versos,
aletárgas en el cofre de los recuerdos
asomas con la energía roja y sosiegas junto al astro inmaculado.
Martín Pereyra