Ya nada, nada, me importa;
Ya entendí la lección,
Si tú das el corazón
Sin más piedad se te corta;
Ves con alma tan absorta
Y con profunda emoción,
Con entrega y con pasión,
Con la ilusión que transporta;
Y tan fácil va la senda,
Y tan barato el amor,
Que les pones, a ojos, venda
Y en el olvido, al honor;
Se te niega la encomienda,
Se te abandona al dolor…