Graciosa y esbelta cual gacela
que pasea nutrida de encanto
por la selva,
así te veo cuando caminas.
Con ese innegable carisma
angelical, con ese hado
o esplendor de luna llena.
Tal vez te veo toda plena
con \"ojo de enamorado\",
pero no puedo verte
o justificarte de otra manera...
Simplemente
haces que mi sangre irrumpa
salvaje en mis venas.
Te conviertes cada día
en la musa conexa y preferida
de mi alma y mente...
En la huerta de mi corazón
eres la flor
blanca y aromática, que aviva
mi amor a la vida
y el deseo irresistible
de amarte siempre
con una gloriosa alegría.
Te aprecio divinamente
que es como decirte
que te amo...locamente,
te lo digo
lisa y llanamente.
NAZARENO (Adolfo César Marcello)
Tucumán - Argentina