Bajo la rosa, la espina
lleva dolor camuflado
magia y ardor en las manos
que te hacen bella la vida.
Y cuando el sol se reclina
la brisa reza en el templo
vuela el recuerdo en el tiempo
y la luz se difumina.
Fragancia intensa encendida
es alma frágil que flota
y sobre el cuerpo rebota
es pura esencia divina.
Se rompe sobre el espejo
ocaso rojo y dorado
nostalgia de enamorado
agoniza en su reflejo.
Los ojos llenos de vida
aguamarina, azul cielo
que engrandecen el desvelo
en la esperanza perdida.
Contemplo desde la sombra
de lo sencillo del verso
el magnífico universo
que por lo infinito asombra.
La palabra es claro oscuro
tímido asomo del sol
es el rayo atronador
lluvia fresca en la llanura.
Amo la luz de la luna
el lucero que titila
la sombra que se perfila
entre las doce y la una.