Vamos, vamos...
muéstrame tu cara, muéstrame
no esa no, la verdadera,
sácate el corazón
soy tu predador solício y quiero todo de ti.
Todo incluye que seas demasiado,
que vuelques lo mejor, no te escondas
detrás del muro de tus ojos por hoy ...
El otoño camina lento al centro mismo
de su cuerpo desnudando todo a su paso.
Vamos, vamos...
que el tiempo no tiene hoy olvidos,
solo deja que tu rostro me muestre tu risa
esa que ni tu conocías,
y, soltaré la mía la que yo tampoco conocía.
Apuesto todo y apuesta todo, nunca
sabremos si tenemos algo que perder,
no somos dueños del destino.
Vamos, vamos...
a arrojar el miedo que se arremolina
dentro del regazo del día.
Que bueno esta lluvia de estrellas
que enfriaron este anochecer pulcro
que raro sortilegio hace que nos encontremos
justo aquí en medio de la nada...
Vamos, vamos...
O... tal vez esté hablando solo
o ... tal vez no quieras ya entrelazarte
en esta extensa brisa que propino:
Piénsalo... no soy dueño mas que de
lo que me regalaste.
Por si acaso también te digo que
tengo esperando una cena
para dos en el lado claro de la luna
una mesa extendida
de ilusiones perdidas.