Cinta que tú a nada estorbas,
en silencio haces compañía
a su cintura, hasta el día
que débil fluyas por sus curvas.
Suave, dulcemente alientas
desde el vestido su belleza
de flor, así con gentileza
todo afirmas, nada aprietas.
Es un amoroso abrazo,
inocente y delicado:
así rodeas sus trazos.
Como forma a su medida,
como estrellas a su cielo:
como sino anhelo en vida.