Esa sensación desconocida
que se adueña de mis noches
abriendo sueños,
despertando emociones
que se aferran al recuerdo
de aquellas brasas que quemaban
las ansias contenidas.
Ese ardor imperceptible
que crece poco a poco
columpiado en la memoria
de los momentos vividos
sacando el ultimo suspiro
para desahogar el alma.
Ese involuntario inconsciente
que regresa a sus querencias
no por voluntad, sino por instinto;
instinto de supervivencia
aferrándose a los restos
del naufragio, para no hundirse
para siempre en el olvido..
UN POETA LÍRICO
Arturo Gil
16/04/2017