Wellington Rigortmortiz

* EL ESCAPISTA

* Primer Momento

 

Me he quedado atrapado

en el interior

de mi propia inspiración,

prisionero de la poesía,

cada una,

fue profecía de mi vida,

muchas tristezas

y escasas alegrías;

me he quedado atrapado

en un tiempo que jamás

fue el mío, aquel,

que solo me mantiene 

ajeno al “verdadero amor”,

me he quedado

sin alma y sin corazón.

 

* Segundo Momento

 

Me he quedado en el vacío

dando mudos gritos

de dolor y desesperación;

me he quedado

a merced del olvido, del odio,

del rencor, …me he quedado

sin poder mirar por ultima ves

la inmensidad del mar

y su exquisita brisa

que cauteriza toda herida,

sin volver a sentir

el frío del viento

acariciar mi rostro

en una caída libre

desde el firmamento;

me he quedado sin Dios,

y sin demonio

a quien poder retarles

sus injustos designios

que rigieron sobre mí.

 

* Momento Final, El Escape

 

Me he quedado,

sin la cálida amistad que solo

los “verdaderos amigos” saben dar,

será quizás,

que acostumbrado estoy a aferrarme

a la presencia material de los sentimientos?,

…como saberlo, si también

me he quedado sin respuestas

y sin la habilidad de poder preguntar,

a quien hacerlo ahora?, si me he quedado

solo, en la distancia, escribiéndole

este poema al cadáver que tanto amo,

atrapado, en el interior

de mi propia inspiración, al final,

el aire se vuelve sutil nuevamente,

y la luz, es mi señal entre tanto forcejeo,

anunciándome que con vida aún estoy,

que toda cadena opresora del alma,

se debilita cediendo

sus candados de dolor

dejando libre cuerpo y espíritu

re apareciendo vivo

pero aturdido, adolorido

en el clímax de esta función

ante la mordaz

incertidumbre morbosa de la gente

y de la tuya,  aun así, 

el show, debe continuar…