Siete letras tiene la palabra viajero.
Me pongo las botas, cojo la mochila
y a descubrir el mundo entero.
Siete letras tiene también mí terrible
deseo: \"dineros\", carecía de ellos, aposté
en el juego y lasuerte hizo el efecto.
La comparación es odiosa y yo evitaba
hacerlo, había conseguido tenerlo,
lo difícil estaba hecho lo siguiente era caramelo.
Todo a mi favor salí del casino feliz y con
precaución. Todo estaba en mi saldo, las
tarjetas de crédito pesaban como oro y yo
,sin saberlo, era espiado hacía unos días.
Siete, rojo , fue mi número de la suerte, y
casi el de mí muerte. Tuve siete tarjetas,
cada cual más llena, y en un callejón oscuro
me asaltaron. dámelo todo\", - \"Solo tengo esto\".
Cogieron otra palabra de siete letras: \" pistola\".
Me apuntaron con ella: - La bolsa o la vida.
Les di la cartera con las siete tarjetas, y les
dije que no tenía nada más. El más alto y más
gordo, se acercó y me asestó siete golpes que
me tiraron al suelo. - \" De verdad, no tengo nada
más \". - \"Sí que tienes, desgraciado, dame los
números secretos\". - 7,7,7,7,7,7,7 fue mi respuesta
sangrante, siete sietes para las siete claves que
me dejarían sin blanca bastante tiempo...
Hasta que volví a apostar, esta vez al siete negro,
demasiado roja quedó la camisa, la acera y mi
desfigurada cara de éxito. Volví a ganar y
me atrapó el miedo. Esta vez las tarjetas pesaban
menos, eran 6 y las claves el número del diablo
doble fueron 6,6,6,6,6,6, seis seises que me
asustaban cada vez que los marcaba, como
PIN,PIN,PIN,PIN,PIN,PIN,PIN el sonido de la
palabra golpeando mi cara, \"culata\" tiene seis
letras que aún recordaba, aunque no aprendí
del dolor que me provocaban. Así que volví a
apostar, eligiendo otro número que anticipara
la jugada. El número fue el cinco de las letras
que \"tumba\" conformaba, el color daba igual,
volví al negro del miedo que respiraba y,
finalmente, no salió pues era lo que deseaba,
cinco letras me salvaron de la tumba anunciada,
\"ruina\" también tiene cinco y al menos tenía
\"vida\" que tiene cuatro y yo no apreciaba.