Florecen los campos
de la tierra mía
el cielo es azúl claro
la tarde mansa, tranquila
¡ Que bonito ! Debajo del puente
cantan los pájaros
el sol sonríe
la melodía de los cencerros
a lo lejos
en el espejo del agua te miran
los renacuajos
se quedan prendados
de tu hermosura
sonríes, ¡ Te quiero !
dame la mano y salta
este arroyo viejo
vienen palomas blancas
a beber en el espejo
los campos ya dorados
y casi secos
la alegre melodía
de la tórtola a lo lejos
las adélfas se bañán
los charcos llenos
donde calman su sed
ovejas y borregos
¡Dame tu mano ! princesa
sin una palabra, te robo un beso
debajo del puente nos miramos
con los ojos de paisajes nuevos
y de palabras que no se dicen
nuestros labios están llenos
la sonrisa plácida
del amor primero
lejos ya de la infancia
por el camino nuevo
eco de mi voz, en la distancia
el viento trae olor a hierba
perfume y fragancia
de los trigos ya espigados
campos de Belálcazar...