Se oyen voces, murmuros y suspiros
por debajo de mi sótano,
eco de recuerdos imperecederos;
vestigio de mis pasos.
Se oyen voces
de un pasado, presente y futuro que coagulan
para solidificar imágenes en los muros del cosmos.
Se oyen voces
que activan el preludio a la nostalgia,
y desencadenan una sonata de viajes y valijas.
¿Alguien más escucha a su sótano?