Desolación
Alma Leticia Salinas
Cuervo4141
Mexicana
Derechos de autor reservados
04/19/2017
Inmaculada fue la sentencia,
maquillada entre enanos
y gigantes, derivando los caballos.
Cuervos disfrazados los turbantes,
palomas marchitas en el infinito.
Acaecida va la siembra, en infertilidad
inmadura, Reyes, caciques la noche.
Erige en arena los tiempos,
la ignorancia de la soberbia.
Cuerno fue la abundancia;
cosechas marchitas,
galerones de la avaricia.
¡Ya llora en el siglo la era de la arrogancia!
Un esclavo, un mendigo bajo un jaque negro,
sirviendo en Torre blanca.
Ríos que mueren, aves que se extinguen,
armas que extinguen en gases silenciosos.
Potencias de la ignorancia en cielos pervertidos.
¡Basta, basta ya no mutilen mis entrañas!
Así clama clemencia la madre que se desangra.
Nada es negro, sólo la inconsciencia.
¡Ya mueren los mártires, ya gozan los incrédulos!
Mi furia será inclemente, ante el destrozo de mis anomalías.... Y así va muriendo el acuífero, así va extinguiéndose la fauna.
Ya mutilen los bosques, ya desgarraron mis mares.
Y agonizando va en sus laberintos el símbolo de la supervivencia.
Madre, verdugo e inocencia....
Los frutos más perversos de sus entrañas.
¡Y un día te llamaron tierra!
¡Hoy sólo desolación de muerte!