Lloras al ver tu rostro, de mil colores convertido en carbón,
Tus árboles frondosos hechos cenizas,
Tus adornos de grama hoy se visten de luto,
Por los pájaros que mueren en el abandono.
Fuego que se alimenta devorando tus vestidos,
Consume, que arrebata, el verdor tus faldas,
Dejando desnudez que tardara años en cubrir,
Tú hermosa flora mudada en cilicio.
Naturaleza abandonada al castigo de tu verdugo,
De la mano del hombre cómplice del fuego,
Nubes de humo que envuelven, te asfixian,
Quitando el azul de tu cielo, por una cortina gris.
No hay humedad en el aire de tus mejías,
Pues tus ojos cual nubes sin agua,
Se han secado,
Ya no puedes llorar
Mueres tu...
Moriré yo...
Wilson Flores
(Autor Hondureño)