Te busco entre la ausencia,
En los aromas percibo
La razón por la que vivo,
Esa divina presencia;
Siempre amando aquella esencia
De aquel suspiro encendido,
Que hoy se encuentra confundido:
Invisible iridiscencia;
Y es que no puedo olvidar
Aquel amor tan divino
Que jamás ha de pasar;
Es cual leve escalofrío,
Ese constate añorar
Algo que ha sido tan mío…