Mélida Berenice Betancourt Sánchez

Tengo ganas de ser mía...

Tengo ganas de ser mía,

comerme a besos,

invitarme al cine

o al salón para arreglarme...

Tengo un deseo insaciable de mí...

De correr y no detenerme,

de llorar por desahogo

y sin dolor...

Tengo tantas ganas de ser mía,

que este deseo me parece increíble

porque con apenas veintidós años de vida

y cautiva por voluntad en dos años de relación...

¡Me perdí!

¡Maldita suerte y cruel destino!

¡Estúpidas decisiones!

Perdí...

Mi sonrisa y mi andar,

mi soltura y mis deseos,

mis aspiraciones y mis más bellos sueños....

¿Os podréis creer?

¿Ahora mis amigos entendéis

el porque mis ganas de recuperádme?

Y estas ganas de mi 

me calientan, me queman en las noches...

¡Y me causan un desvelo enorme!

¡Tengo ganas de ser mía!

¡Cogerme de la mano y salir corriendo,

retomádme por completo y vivir!

Y sólo eso deseo...

Ser mía y ser feliz.