La confianza en sí mismo radica en asumir nuevos caminos en la certeza de que lo que vendrá será bueno para nosotros aunque a simple vista no se vislumbre con exactitud el resultado final.
Confiar en el proceso y permitir que la intuición fluya y nos guíe. Tener a la vista que todo aquello que nos moviliza interiormente es señal de que hay que meditarlo y trabajarlo. Recordar que NADA ES PERSONAL.
Si alguna palabra o acciones de una persona te activa, el asunto, eres TU MISMO, aunque pareciera que el detonante fuera el culpable.
Detenerse y moderar nuestros impulsos. Dejar ser. Modularnos y sintonizar el corazón para ver con clarid