La vida para mi ha sido,
muchas veces estando sola,
un eterno navegar
como un barco que ha seguido
los vaivenes de la mar.
He tenido tempestades
que me han hecho remecer,
la vida no la he querido.
pero ... paso la tormenta
y navego sin querer.
Mi barco va a la deriva,
no lo puedo dirigir
es el viento que lo guia
aunque yo esté pensando,
que ya no quiero vivir.
He viajado largos años
conociendo muchos puertos
donde he encontrado de todo,
pero vuelvo a la mar de nuevo,
en este destino incierto.
Por fin mi barco ha llegado
al puerto de mis amores!
¡Se terminó el navegar!
Ahora el amor es mas fuerte
matizado de colores.