Hoy me derrumbé.
No quería que vieras
ni lamentos, ni lágrimas
ni heridas.
Fue demasiado.
caminé tu cuerpo,
me detuve en tus labios,
me tomaste en tus brazos,
me hundí en tu silencio,
me partí en pedazos
esperando la entrega.
Me despeñe completa,
ya no era mía
sin embargo…
fueron más preguntas,
más preguntas necias.
La soledad
me afrenta,
me desnuda
sin decir tu nombre
y yo esperando el día
en el que abras la puerta.