Un silencio profundo con dolor estremece
a mi patria querida que de pena fenece
por la cruel dictadura que el tirano le ofrece!
Se escuchan los lamentos en tristes diapasones,
que nacen desgarrados de nobles corazones
que padecen tortura de siniestros matones!
Está muriendo lenta, muy progresivamente,
esperanzas hermosas que alimenta mi gente
de ver brillar la aurora de forma reluciente!
Llorosa y compungida se encuentra la Justicia,
su balanza repletan de mezquina inmundicia.
y violada se esconde de la ingrata avaricia!
Libertad se consume con nefastas cadenas,
y quien la sacrifica tan solo son las hienas
repletas de ambiciones, sangrientas, tan obscenas!
A la Blanca Paloma de La Paz han matado
y su nido lo tiene con maldad destrozado
el verdugo sonriente de bondad disfrazado!
Que nazca en nuestras almas la furia de los vientos,
que en nuestro ser germine del tigre sus portentos
y dar por terminados amargos sufrimientos!
Los tiranos le temen a los pueblos unidos
si observan en sus rostros los ojos aguerridos,
y llevan en sus almas del puma sus rugidos!!
Autor: Anibal Rodriguez.