LoboRamz

No me haces falta (depresiĆ³n)

No me haces falta (depresión)

Te instalaste en mí, me hiciste sufrir y llorar y no de amor

Me encontré frente a ti, un día sin esperar

Te tuve frente a mí, mas jamás te acepte mi cuerpo sintió la sensación de morir

Fuiste el intruso de todos mis miedos y tu sabor fue tan horrendo

 

Tocando fondo me encontré

El espejo se hizo de arena, el agua se hizo de tierra

El corazón se hizo de cristal

Mi cuerpo se hizo de papel sobre el cual tú escribías lo que querías

Preso en mi interior fui de mi libertad de soñar

Me hiciste melancólicamente pensar, en no volver a disfrutar

Mis miedos lloraron junto a mí…

 

Mi piel se quebró como la ceniza del fuego, mi luz se apago

El  miedo acepto el dolor, mi corazón sintió el terror

Las casa de mi imaginación todas sus puertas y ventanas cerro

Me pregunte quien soy yo?

 Hacía que punto girara mi reloj?

 Que hago solo en esta habitación?

Moría en fragmentos en cada mañana,

 Cada tarde perdió la magia,

La noche era la más amarga…

Los suspiros se ahorcaron en cada uno de mis taquicardias…

La familia se destruye en cada una de mis lágrimas

Mis gritos parecen estar callados, mis sonrisas han sido presas de tus prisiones

La soledad ha sido la única valiente que jamás me abandono…


Varias veces entreviste a mi cuerpo

Siempre haciéndole la pregunta

 Porque yo? No soy fuerte? No tengo algo especial?

La pregunta jamás fue contestada, y entendí que jamás se marcharía

Si día a día como zángano se comía mis pocas alegrías

Entendí que vivir con un monstruo

Seria parte de mi día, rece a dios rece a mis ancestros

Sin jamás tener respuesta,

Mas entendí que solo aceptándola y conviviendo en unión, sería un mal necesario para vivir.

 

Algunas veces me come el miedo, mas amo mucho mi vida y mi cuerpo, solo es cuestión de no temerle ni mostrarle interés, y eso la ahuyenta pues es celosa de mi felicidad, no puedo poner una presa para detener cada una de mis lágrimas que aún me saca, solo que ella sabrá que siempre serán derramadas por la mejor causa, conocerla salvo y regreso todas mis esperanzas, conocida depresión solo le diré una vez más usted no me hace falta, márchese y deme todos los cerrojos de la casa……

 

Era una lucha diaria vivir contigo, intrusa en mi vida, y fuiste tan egoísta que querías  que olvidar, mis alegrías”