María del Rocío

Vive

Calla corazón tus quejas,

verás que valen más las sonrisas. 

Deja de largo tus cuitas, 

que el alquitrán en las nubes,

se podrá llenar en lágrimas tristes 

pero al derramarse, pronto olvidan.

Silencio corazón no digas,

que el dolor llega y oprime

el día a día. 

Si hay sol en primavera,

el canto incesante del cenzontle;

y flores de gubambilias.

¡Levanta tus pies cansados,

mira el naranjo cargado;

y a esas aves que lo habitan!

Sal de cama, que tu piel 

bese luz de rayos claros,

de mañana que iluminan.

Comparte el fruto del manzano 

con aves que visitan.

Disfruta de su trineo,

escucha aguas cristalinas

de la fuente que salpica.

Corazón,  olvida ya tus pesares,

sonriele a la vida, toma,

de sus regalos. 

Pues no sabes si mañana 

en tu vida, habrá más vida...