en el mar sordo de tu indiferencia
es que me hallo hastiado de tanta peca
a cambio de montañas de angustia
es que solo tiene un poco de manteca
salid¡
ahora solo queda el muladar de tu conciencia
que a pocos convense de quedarse estáticos
que a muchos contrata escritos con la muerte
hoy puede ser el día para cambiar