Fui leña
fui sol
fui árbol caído
fui el destierro
que arrancaron de raíces
mis pies talados
quemados a fuego lento
mi fauna salvaje
de dar vida
aire puro, buena vida.
Fui la madera natural
que limpiaba las hojas
y las flores
el agua manantial por mis poros
hoy extraña su cauce
hoy padece la mano del hombre.