Desde el comienzo fuiste destinada como la ayuda idonía, desdichada por ser la fuente del pensamiento y fundamentalmente UNICA por ser llegada de la costilla dorsal de el hombre.
Eres la fuente del pensamiento por dicho resplandor y de ser de ayuda mutua.
Eres como la lluvia lleva de bendiciones fructicando todo a tu pasó, Eres!!, La tonada que al susurro sacia mi alma agotada de los bastos mundos destichado. Eres mi luz y mi caminar, eres DALILA con mis opresores, VEO tu instinto en mi espejo en esta odisea, confirmando, tu, el milagro de la esencia notable de mi felicidad
¡¡¡DIOS TE BENDIGA MUJER!!!