Quise armar un poema
para alabar tu grandeza
y te me quedé mirando
y no supe que decir…
¡¿Qué puedo decirte yo?!
si tú pusiste la palabra en mi boca
y la endulzaste con el beso
y la templaste en una nalgada
Me miras y en tu pupila
un manantial de sueños
amenaza derramarse
y es que al auscultarme
sabes que no soy yo…
eres tú,
prolongada en mis actos,
eres tú,
postergada en mis deseos
eres tú,
crucificada en mis besos