WandaAngel

MADRE

Mami, fuiste mi pan, mi agua y eras mi cielo. Sabana de mis noches y luz en mis sueños. Nací de ti como una herida, de tus entrañas y de tus senos. Soy carne de tus carnes y celo de tus celos. Fuiste mi mundo, mi abrigo y estuve en ti como un collar en el cuello. Te miré desde el piso y seguí tus pasos lentos como se sigue a una estrella que me llevará a un mundo nuevo. Mami, ya no estas pero tu voz conservo, tu mirada y tus silencios. Fuiste espacio, sentido y verbo. Y aún miro con tus ojos y hablo con tus modos y tus gestos. Tus palabras suenan en las mias como un eco entre ecos. En mis venas corre tu sangre como el calor de tus sueños y al mirar a mi esposa me siento yo completo.  Mami, fuiste mi pan, palabra precisa y mi cielo. Ahora veo a mis hijos siguiendo tus pasos de ejemplos.