El éxtasis se coló
por los poros de su piel.
La belleza la balanceó
en sus tibios brazos.
El viento la llenó
de besos en la frente.
Las flores hacían
cosquillas en sus ojos.
El cielo la miró de reojo
lanzando destellos azules.
Las rocas acompañaban mudas,
a veces se les escapaba
una leve mueca de felicidad....
Su corazón como nido de pájaro
sereno, en calma
lleno de flores en primavera.
En las orillas de su río
se empaparon mis sentidos
de dulzura fresca!
Quiero abrazarte con fuerza,
naturaleza,
en el rincón más alejado del silencio
cavar surcos profundos
para protegerte,
ante la barbarie imparáble
que te acecha,
avanzando sin piedad
por las cuatro esquinas
del planeta.
Ay! Mi querida Naturaleza.
-Correjido-
16-5- 2017